jueves, 21 de marzo de 2013

Balam, la senda del jaguar. Antonio Guadarrama Collado




Segunda parte de la trilogía de Antonio Guadarrama Collado, y probablemente, el mejor de los 3.

Después de que Diego Daza fue obligado a salir huyendo del país rumbo a Francia y lo que parecía ser el final de Gregorio Urquidi, la historia revive con más fuerza que nunca. Esta vez el objeto de deseo de todos los personajes no es un libro, es un Monolito antiguo que fue descubierto en la ciudad de México mientras se construía una nueva línea de metro.

Gregorio Urquidi, Su alteza serenísima, tiene más poder, dinero y maldad que nunca. El hombre que maneja la Iglesia católica y por consiguiente el país entero, finge su propia muerte con la finalidad fundar su propia Iglesia un negocio sin impuestos y sin rendirle cuentas a nadie, y con el poder de influir directamente en las personas. A su lista de aliados políticos, empresarios, sacerdotes y narcotraficantes se suma un nuevo e inesperado aliado. Su venganza parece ser perfecta.

Delfino Endoque, Saddam y Gastón Peralta Moya, tratarán de buscar el monolito y sabotear a los planes  Gregorio Urquidi.

El autor, al igual que en el primer libro de la serie,  hace una perfecta combinación entre el drama de los protagonistas y la historia antigua, en este caso, la defensa del pueblo maya comandada por Gonzalo Guerrero,  contra el ejército español que buscaba riquezas. 
Gonzalo Guerrero, un náufrago que fue adoptado por el pueblo Maya y del cual se convirtió en general y posteriormente en el líder de toda una civilización, el español más mexicano de la historia, y uno de los personajes más olvidados en la historia de la conquista.

Calificación 10 / 10

1 comentario: